Perros, pues era verdad
No sé cómo viví tantos años sin este montón de pelo que me sigue a todas partes con sus tac-tac-tac de bailarín de claqué. Nunca me gustaron los perros, me espantaba el olor, las babas, la posibilidad de que me … Leer más
No sé cómo viví tantos años sin este montón de pelo que me sigue a todas partes con sus tac-tac-tac de bailarín de claqué. Nunca me gustaron los perros, me espantaba el olor, las babas, la posibilidad de que me … Leer más