Hace unos días María Teresa Fernández de la Vega me dijo en una entrevista que el nuevo mundo que hay que construir o lo hacen juntos hombres y mujeres «o no será para bien».
La primera mujer que presidió un consejo de ministros en España sin ser reina es una buena inspiración para este día de la mujer del año número no sé cuántos de «la que está cayendo».
Me decía Mª Teresa que había que contar con nosotras, claro que sí, porque representamos el 50% del talento. ¿Cómo vamos a renunciar a la mitad del talento?, se preguntaba la exvicepresidenta ahora entregada a su fundación Mujeres por África.
Las estadísticas nos informan de que somos mayoría en muchas facultades universitarias, pero minoría en los puestos de poder. También que cobramos menos que los hombres, aunque hagamos los mismos trabajos y tengamos el mismo -o más- talento.
Todavía queda techo de cristal que romper. Y aún así somos afortunadas porque en otros paises este techo es de hormigón. Pero continúan las diferencias, las violaciones y los asesinatos de mujeres por el mero hecho de serlo.
Durante muchos años me repateó el día de la mujer, «Ni que fuéramos menos», me decía. Aunque yo no lo apreciara tanto entonces, el machismo empapa nuestro mundo. Es verdad que ya no tenemos vedada la apertura de una cuenta bancaria como sucedía hace 40 años, pero sufrimos otras tropelías.
Y empapa el lenguaje que no es poco. Siento no poder citar la fuente porque cogí este argumento al vuelo haciendo zapping en la radio. Una feminista se preguntaba ¿por qué algo bueno es cojonudo y algo malo, un coñazo?
(Después de la entrevista le pedí permiso para que nos hicieran una foto. Es de Juan Carlos Alonso)

Mariana Navarro Chirino
Querida Ángeles gracias por tu blog pero sobre todo GRACIAS por este artículo para todas nosotras. En mi opinión y por mi experiencia personal creo que Mª Teresa Fernández esta bastante acertada en cuanto al cincuenta por ciento masculino. Hablando siempre desde mi propia perspectiva laboral puedo decir que he vivido durante veinticinco años momentos en que nosotras no éramos más que burras de carga de un soporte ultra machista, donde únicamente asomaban las maniobras de los hombres aunque fueran pésimas maniobras. He vivido momentos en que empezábamos a despuntar y nuestra labor poco a poco iba tomando cuerpo. Después vinieron otros momentos en el que la cúpula de poder fue únicamente fémina y con mucho desconsuelo debo decir que tampoco fueron brillantes. Ahora en estos momentos vivo compartiendo y es como mejor he estado. Sin embargo y lejos de ser/parecer agorera, todos los momentos que seguimos y seguiremos viviendo seguirán teniendo ese matiz deslucido e ingrato para nosotras porque debemos seguir multiplicándonos todos los santos días únicamente para mantenernos a la altura, altura que nos hemos ganado a pulso TODAS LAS MUJERES.
Un abrazo amiga mia
Ángeles Arencibia
Bueno, Mariana, adelante. Un beso.
Cira
Querida Angeles, siempre pensé que Mª Teresa Fdez hubiera sido una presidenta magnifica para este pais y admiro su teson en la defensa de nuestros derechos.
Esta tarde, despues de felicitarme, mi hija de 11 años me ha preguntado qué celebrabamos y sin querer entrar en descripciones históricas le he dicho que ser mujeres y luchar por nuestros derechos, reivindicarlos, querer cobrar lo mismo que un hombre haciendo el mismo trabajo, poder decidir por nosotras mismas, … y he acabado diciéndole lo mismo que me decía mi madre: » tu podrás ser lo que quieras ser porque otras antes que tu han peleado para que puedas hacerlo».
En estos tiempos de derechos mermados creo que todavía más hemos de manifestarnos y reivindicar ese cincuenta por ciento de talento.
Ángeles Arencibia
Hola Cira. Yo opino lo mismo que tu sobre Mª Teresa y también tengo hijas, dos. Un abrazo.