El amor y el reino

Publicado en: actualidad 1

Ya pensaba hablar de este asunto pero ahora, con Barbra Streisand en la tele preocupada por su significado, parece que me estoy copiando. Y no es así.
Barbra es una de mis artistas favoritas -quizás la que más-, pero esta idea me la inspiraron mis amigas en nuestra cena anual.
Las conversaciones se sabe cómo empiezan pero no cómo terminan. Hablábamos de Urdangarín, del escándalo que protagoniza y de la indignación que nos produce, pero la conversación fue descolgándose y saltando de aquí para allá como por las ramas de un árbol genealógico de una familia muy aristocrática.
Y de Urdangarín y su papelón nos fuimos a un terreno mucho más familiar. Hablamos de nuestros problemas y de los problemas de gente que queremos. Son tantos años ya de conocernos y compartimos tantos conocimientos que podemos hablar casi de lo que sea sin tener que añadir letra pequeña.
Hablamos de asuntos de pareja, de algunos casos concretos que no vienen al caso, y me quedé pensando en lo arriesgado que es enamorarse.
El enamoramiento te coge por el cuello, te zarandea, te levanta por el aire … tanto, que es mejor no ponerse delante de una persona enamorada. No atenderá a razones, así le presentes un memorándum o todos los tomos de la Enciclopedia Británica.
Una se enamora y pierde el oremus, que decía mi madre. Te sacude como el tornado de Judy Garland, como el centrifugado de una lavadora. Dicen que es una reacción química.
En esa conversación entre amigas, dos de nosotras hablamos de amores y de algún desaguisado que se ha descubierto una vez que el enamoramiento se había sosegado.
Pensé que, en realidad, una está indefensa ante este fenómeno tan poderoso, porque, cuando el enamoramiento baja y te ves las caras con tu enamorado/a, puede que te encuentres con un sapo o que se descubra que tú eras una rana.
Hilé una cosa con otra: Urdangarín, el enamoramiento y la dificultad de domeñarlo, lo sacudí todo y me acordé de un poemita que dice
«Por un clavo se perdió una herradura,
por una herradura, se perdió un caballo,
por un caballo, se perdió una batalla,
por una batalla, se perdió el Reino …»
y que según leo aquí explica nada más y nada menos que la Teoría del Caos.

  1. ELIA
    | Responder

    Yo tambien vi la peli de ayer , es mas , volvimos mangados de Santiago para verla , es una de mis favoritas por la banda sonora .
    Si , el enamoramiento es tremendo , tremendo , ¡¡¡cuantas locuras se hacen estando enamorado!!!!! y que mal se pasa ,cuando no se es correspondido.
    ….y dicen que el alma no duele , no que va .

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

He leído y acepto la política de privacidad

Información básica acerca de la protección de datos

  • Responsable: Ángeles Arencibia
  • Finalidad: Mantenimiento de la relación contractual establecida entre las partes, la gestión y/o asistencia de su solicitud o consulta
  • Legitimación: Diligencia precontractual
  • Destinatarios: Organismos oficiales cuando exista una obligación legal. No hay transferencias internacionales. Existen cesionarios que pueden acceder a sus datos personales para poder prestarles los servicios contratados
  • Derechos: Acceso, rectificación, cancelación, oposición, y cualquier otro especificado en la política de privacidad
  • Más información: Puedes ampliar información acerca de la protección de datos en el siguiente enlace:política de privacidad